En Jesús María, cuando se cuadricularon los terrenos donados por Pío León, no se asignaron espacios para plazas públicas, centro cívico ni Iglesia. Alrededor de la estación de trenes existían amplios espacios y cuando surgió la necesidad de una plaza pública se destinó el lote ubicado al noroeste de las vías férreas. Este hecho está documentado y fechado en 1873.
Durante mucho tiempo se llamó Plaza Pública hasta el 1950 que se le otorgó el nombre de San Martín honrando el centenario de la muerte de dicho procer argentino.
Es el lugar elegido para festejar victorias deportivas y políticas para la realización de actividades sociales y culturales, actos patrióticos y también para reclamos.